por Rosario A. Puga-Dempsey

Si las flores siguen creciendo, el sol sigue saliendo y la luna sigue brillando, porque se siente tanta impotencia. ¿Qué pasaría si nos dejamos llevar por este sentir de impotencia? Si no puedes contra la marea, ¡únete! ¿No?

Quizá sea hora de estar en sintonía con el universo y no forzarlo a que él este de nuestra parte.

Quizá sea hora de intentar no estar en sintonía y ver qué pasa.

Quizá sea hora que el universo nos mande a nosotros.

Lo interesante es como cambia nuestra experiencia y perspectiva cuando simplemente nos dejamos llevar. Algo tan fácil, sin embargo, tan difícil a su vez. Tan difícil por nuestras propias limitaciones, por el “qué dirá” o “el deber.” El cambiar el deber al querer es algo que se comparte mucho en relación al duelo. Pero  hoy se puede poner en práctica no solo porque todos estamos en duelo si no porque el pesar de que nos digan que debemos hacer ya se siente insoportable.

Demosnos la oportunidad de explorar la posibilidad del “quizás” y de cambiar del “deber” al “querer.”